miércoles, 24 de febrero de 2016

LO SABEN TODO: Te vigilan.

PELIGRO, TE VIGILAN.

(Imagen del autor).
Leo un artículo en el periódico firmado por Ana García Siñeriz que alerta de la exposición que todos hacemos en Facebook o Twiter y demás redes, un escaparate en el que pueden hurgar tus futuros empleadores y conocer (o interpretar) tu modo de vida para valorar la conveniencia o no de ser su empleado/a advertidos por tus fotos, tus veleidades políticas o tu forma de interpretar el mundo. Ya habla de ello el filósofo Byung Chul-Han como la sociedad de la “Transparencia”. Las redes, cuya utilidad y posibilidades nadie discute, se convierten en un expositor de nuestras vidas, en Facebook originalmente ponía solo “me gusta”, la idea era que todo sonase bien, complaciente; preferimos buenas noticias a malas y así mucha gente se decide a compartir en la red sus vivencias, sus apetencias e incluso el discurrir de su vida, las fotografías de momentos cotidianos o importantes etc. y lo hace con amigos a los que no conoce personalmente pero que son amigos de amigos que piden su amistad. Lo que es una gran idea que fomenta la relación entre humanos se puede convertir en un muestrario de personal que puede ser (es) estudiado por otros y en su momento utilizado de modo inadecuado (por decirlo de alguna manera) cuando no como modo de extorsión o presión.

Todo esto lo podemos reflexionar y entender pero es asombroso el poder de atracción que tienen las redes para que los ciudadanos se “expongan” con tanta facilidad y ligereza. Mi preocupación está en las consecuencias que esto pueda tener para los adolescentes y jóvenes que son usuarios habituales y “compulsivos”. Además la regulación, la legislación sobre el uso de la red es precaria y tiene lagunas legales importantes lo que añade vulnerabilidad al individuo que las usa. Todo lo dicho, escrito, fotografiado queda en la “nube” y no se extingue. Si alguien quiere hacernos daño no le demos la oportunidad.

miércoles, 10 de febrero de 2016

¿Seguimos una dieta saludable?

¿DIETA MEDITERRÁNEA?

Los tratados de nutrición y los media nos hablan constantemente de la dieta mediterránea que en realidad son dietas no una sola y que se basa en un importante aporte a base de cereales, legumbres y frutas, uso de aceite de oliva, aporte proteínico normal (pescado, conejo…) y poca grasa. El vino sería la bebida habitual. Esta dieta se contrapone a la del norte con grasa y carne abundante, menos verduras y pescado, mantequilla y cerveza.
Las bases de La Dieta Mediterránea son “el aceite de oliva, consumir alimentos de origen vegetal en abundancia (frutas, verduras, legumbres, frutos secos), el pan y los alimentos procedentes de cereales (pasta, arroz y sus productos integrales), alimentos poco procesados y de temporada, consumir diariamente productos lácteos, principalmente yogurt y quesos, la carne roja se tendría que consumir con moderación y si es posible como parte de guisos, consumir pescado en abundancia, agua y vino solo en las comidas, realizar actividad física todos los días”. (Fundación Dieta Mediterránea)


Se concluye que la dieta Mediterránea es la más saludable (UNESCO)
Pero ¿los españoles hacemos dieta mediterránea?
Según los datos de la Agencia de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AESAN) 2011
La tendencia es que se consume grasa en exceso y proteínas y pocos hidratos de Carbono
DIETA IDEAL: Las calorías de la dieta se distribuyen idealmente 50 % Hidratos de Carbono, <15 % Proteínas y 35 % grasas. Pero la dieta real española es: H de C: 41,4 %, Proteínas 16 % y Grasas 40,2 %


La tendencia actual es a comer alimentos más procesados, menos de temporada , no frescos ni de la región o entorno, hay un  mayor consumo de proteínas y grasas (bollería, bebidas azucaradas ¡muy azucaradas!) y disminución del consumo de Hidratos de carbono complejos (pan, arroz, patatas), verduras y frutas y ello unido a una disminución de la actividad física.
Asi que: Menos grasa y mas verduras, frutas e hidratos de carbono:
¡Volvamos al Mediterráneo!